El crecimiento de Internet ha puesto al descubierto miles de bases de datos de empresas y gobiernos en el mundo. Esta herramienta se ha abierto el acceso para que cibercriminales usen a las redes sociales como un método para la extracción de datos y lo que es peor la suplantación de identidad.
Tan solo en México con base al reporte de la Organización de los Estados Americanos (OEA), los costos anuales generados por el ciberdelito durante el 2014 ascendió a 3,000 millones de dólares y en donde México ocupa el tercer lugar en América Latina.
¿Por qué debe preocuparnos esta situación?
Todo viene a razón de la investigación que realicé sobre como denunciar o combatir los delitos informáticos; y es que recientemente, me han contactado usuarios y empresas buscando asesoramiento sobre qué podría hacer en una red social donde estaban usando su nombre para realizar publicidad engañosa y es aquí donde viene el tema por el cual nos debemos preocupar. Resulta que Facebook ha cambiado de nuevo sus políticas para hacer denuncias de imagen, perfiles y páginas, donde ahora el sistema de prevención resulta absurdo y he aquí las razones.
Caso práctico
Suponiendo que encontramos que alguien en Facebook está usando nuestra imagen personal o de marca para hacerse pasar por nosotros, ofrecer algún premio o servicio y queremos hacer una denuncia, lo que tendríamos que hacer es seleccionar la imagen y dar clic en reportar o denunciar, hasta aquí podríamos pensar que el proceso es sencillo.
Una vez que estamos, las demás opciones que aparecen nos dan respuestas tan absurdas como bloquear para no ver más esa publicación, lo que no resuelve el problema, por ello la opción que podría ayudarnos a poder realizar la denuncia pertinente es la opción No debería estar en Facebook.
Una vez ahí se abrirán otras opciones y es aquí donde el proceso denuncia no ayuda, ya que nos dan diversas opciones donde la más efectiva sería denunciar por la venta de drogas pero si la foto no tiene nada relacionado a ese tema, el sistema te indicará que no puede ser borrada porque no está infringiendo ninguna norma.
El problema radica en que las opciones de denuncia, la mayoría solo nos da la opción de no ver más publicaciones, pedir ayuda a quién más confianza le tengamos, enviar un mensaje a la persona que está cometiendo el delito, para solicitarle que borre la publicación, este último es el más absurdo ¿Quién va a querer notificar al ciberdelincuente? Y si se trata de derechos de autor, ¡Sorpresa! no hay forma de hacer la denuncia por este método, más que por medio de un formulario, el cual no es efectivo, porque literal tienes que ingresar el número de registro de propiedad entre otros documentos, que de no tenerlos tampoco podría ser objeto para eliminar el post.
Mi segunda opción fue hablar a Facebook donde me comunicaron a Colombia, cosa que de nada sirve si te encuentras en México, una vez ahí solicite ayuda de soporte, el cual en efecto me indico que no hay manera de borrar el post usando la red social, solo si se realiza un reporte en una liga que quedo de enviarme, pero que jamás llego, lo cual me hace pensar que tal formulario adicional no existe.
Algo que comentaba el ejecutivo es que el sistema funciona con bots que revisan los reportes y si varias personas están reportando el mismo post, entonces este pasa a una persona real quién se encarga de validar si en efecto se está infringiendo las normas de la red social, por lo que el proceso puede durar semanas o hasta meses, para lo cual sería demasiado tarde si el ciberdelicuente ya cometió el fraude o realizó el robo de identidad, además eso tampoco asegura que se borre, pues en la mayoría de las políticas, Facebook protege al delincuente o más bien le da argumentos para hacerlo inmune sin recibir castigo. Es por ello que narcotraficantes o delincuentes sigan en esta red social, sin ser objeto de aprehensión.
¿Por qué en México no se persigue este delito?
Porque en nuestro país por desgracia los ciberdelitos son considerados como no graves en el Código Penal, y es que, el creciente uso de las tecnologías, la falta de conocimiento sobre cómo actuar contra este tipo de crímenes y las bajas sanciones que estipula la ley, ha provocado que hacktivistas o grupos delictivos no le tomen importancia, porque realmente ganan más de lo que podrían ser castigados. Donde si se llega a demostrar que hubo un delito pueden tener penas mínimas por 6 meses o máximo 5 años, pero… para llegar a este punto se tiene que pasar por una denuncia al Ministerio Público para que entonces se inicie la averiguación.
Y es que regresando al caso real hable a la Policía de Ciberdelicuencia Preventiva (antes Policía Cibernética), donde le explique al operador la situación y lo único que hizo fue lanzar un discurso del área, para posteriormente decirme que no hay nada que hacer porque si uno quiere denunciar un fraude en una página o red social se debe traer a los testigos a que declaren y en caso de no existir no procede para hacer un reporte, en caso de que sea suplantación de identidad también se debe presentar a los testigos que avalen que se trata de una persona que no es la que denuncia. Si todo esto no es suficiente al final comentó que la unidad solo es preventiva por lo que no pueden proceder una orden de investigación si se desea hacer se tiene que ir al ministerio a levantar la denuncia para que pueda proceder a una investigación penal, siempre y cuando haya delito que perseguir pero que si es a causa de una red social, el usuario o solicitante de la denuncia tiene que reportar a la red social para que esta averigüe y borre el contenido.
En resumen nuestra policía cibernética no está facultada para seguir delitos, entonces la pregunta que les dejo a reflexionar es: ¿quién podrá protegernos en caso de estos ciberdelitos?
Espero que esta investigación te sea de ayuda para informarte y tomar medidas adicionales; como lo he comentado en anteriores guías, es importante tomar medidas de seguridad, contraseñas fuertes, evitar compartir ubicación, usar antivirus, no abrir links de desconocidos, no aceptar desconocidos, proteger nuestras imágenes, no ingresar datos bancarios en mensajes vía redes sociales.
En el caso de que sean una marca, crear una guía de manejo de crisis y políticas de convivencia en el sitio, para que así sus seguidores sepan que el mal uso o comentarios ofensivos son sujetos a acciones legales o bien a ser baneados del grupo.