La invasión rusa de Ucrania ha llevado a algunos expertos a preguntarse si los tanques siguen siendo relevantes en la guerra moderna. El armamento actual ha puesto en evidencia ciertas vulnerabilidades en este tipo de blindados, que en ocasiones deben moverse con jaulas metálicas artesanales para proteger las partes más débiles de su casco.
Pero las principales potencias militares del planeta parecen estar lejos de querer jubilar estos vehículos. De hecho, algunas de ellas están invirtiendo considerables sumas de dinero para actualizarlos. Este es el caso de Reino Unido, que ha presentado el Challenger 3. Se trata de un tanque de combate principal que abraza lo último en tecnología. Veamos.
Challenger 3, lo último del Ejército Británico
El Challenger 3, como veremos a continuación, es una evolución directa del Challenger 2, el principal vehículo de combate blindado del Ejército Británico. Detrás de ambos vehículos está Rheinmetall BAE Systems Land (RBSL), un contratista que no ha dudado en afirmar que se está produciendo “el tanque de batalla principal más avanzado y capaz de la OTAN”.
Por su parte, el Ministerio de Defensa británico ha afirmado que es el “tanque más letal que ha tenido el Reino Unido”. Estamos frente a un conjunto de declaraciones que, aunque ambiciosas y llenas de superlativos, deben ser analizadas con cautela. Las afirmaciones de superioridad tecnológica en el ámbito militar son algo tan frecuente como inevitable.
Cuando hablamos del Challenger 3 estamos haciendo referencia a un vehículo pesado diseñado para cumplir misiones en todo tipo de climas. El mismo cuenta con sistemas de observación para comandante y artillero que funcionan tanto de día como de noche, blindaje general mejorado, con protección adicional en la parte frontal y en los laterales de la torreta.
El tanque posee, además, un mejor sistema de comunicaciones tácticas, un motor optimizado, mayor rendimiento del motor, arquitectura electrónica abierta que permite futuras actualizaciones y cañón de 120 mm que permite disparar munición estándar de la OTAN y municiones mejoradas. En su interior, este blindado de 66 toneladas, puede transportar hasta cuatro personas.
Cabe señalar que no estamos ante un tanque completamente nuevo. Aquí, un dato que puede pasar desapercibido: los tanques Challenger 3 son, básicamente, tanques Challenger 2 mejorados. RBSL recibió en mayo de 2021 un contrato por 800 millones de libras esterlinas (poco más de 950 millones de euros) para el proyecto.
El mismo consiste en actualizar 148 tanques Challenger 2 existentes, que se convertirán en Challenger 3. Esto quiere decir que cuando los nuevos tanques empiecen a entrar en servicio (se calcula que en algún momento de 2025), el Ejército Británico no incrementará su cantidad de blindados, sino que tendrá algunas de sus unidades mejoradas.
Source: Crealo