La tragedia golpeó de nuevo a aquellos que se aventuran a ascender a la cima más alta de nuestro planeta.
En las últimas horas tres escaladores murieron -aparentemente por mal de altura-, otros dos desaparecieron y cerca de 30 enfermaron en el monte Everest, en la cordillera del Himalaya.
El holandés Eric Ary Arnold, de 36 años, perdió la vida el viernes tras llegar a la cima de la montaña, y la australiana Maria Strydom, de 34, murió el sábado mientras descendía de la cumbre. El escalador indio Subhash Paul falleció este lunes.
Son las primeras muertes de la actual temporada de escalada en el Everest, la primera en dos años, tras el terremoto de Nepal de abril 2015 que causó la muerte de al menos 18 personas.
En 2014 la temporada de escalada terminó prematuramente después de que 14 guías murieron en una avalancha.
En las últimas horas dos alpinistas indios, Paresh Nath y Goutam Ghosh, desaparecieron en el área de la montaña que se conoce como “zona de la muerte”, cerca de la cima, le contó a la agencia de noticias Associated Press Wangchu Sherpa, de la compañía Trekking Camp Nepal, en Katmandú.
Según los expertos, no es raro que el mal de altura se cobre vidas en el Everest.
Gyanendra Shrestha, que trabaja en el Campo Base del Everest, le dijo a la BBC que la ceguera de la nieve, el mal de altura y la fatiga son patologías que suelen producirse a altitudes elevadas, aunque la mayoría de las veces los afectados se recuperan tras descender la montaña.
Información de BBCMundo