Tan grave está el problema del bullying en las escuelas y los pleitos por retos virales en las redes sociales, que hasta los diputados locales pararon antenas y sucedió lo impensable: que el PAN y Morena coincidieran en la necesidad de legislar para hacer frente al acoso escolar que si bien no es problema nuevo, la tecnología y la fácil accesibilidad a los dispositivos electrónicos han provocado que el bullying se salga de control y tan sólo en los últimos días hayan sido registradas en video al menos una decena de pleitos en las instalaciones de las escuelas, en especial en secundarias, así que para irle dando celeridad a la búsqueda de soluciones, los diputados propusieron legislar en esa materia y crear una ley contra el acoso escolar, además de penalizar esa conducta que actualmente no existe como delito en el Código Penal, por lo que en esta ocasión los dipus locales del PAN y Morena se llevan su estrellita, sólo falta que le pisen el acelerador para que las iniciativas se dictaminen y posteriormente se aprueben, sin embargo, esta causa en común demostró que la Tribuna del Congreso del Estado es más valiosa cuando se usa para lo que es, y no para estar peleando por ideologías políticas.
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Pero el que no deja de pelear porque precisamente su fanatismo lo ciega y lo aleja de usar la cabeza para hacer política y no grilla barata, es el súper delegado Juan Carlos Loera, quien al menos unas dos veces por semana elige a su adversario en turno. Y en esta ocasión contra quien se fue la yugular es la presidenta del Poder Legislativo local, Adriana Terrazas, a la cual Loera le recriminó por votar a favor de la reforma constitucional reciente que aprobó el Congreso y que le dio ese carácter de constitucional al presupuesto participativo, la paridad de género y extendió el límite de días en que el titular del Ejecutivo pueda ausentarse sin permiso del Legislativo, además de la modificación en los informes del Gabinete. Vaya, una reforma que disgustó a morenos y que la legisladora morenista votó a favor.
Así que fue ese motivo por el que Loera de la Rosa arremetió contra Adriana, acusándola de usar a Morena para llegar a una curul, y de trabajar de la mano de panistas y priistas, cuestión que no puede ser negada, porque simple y sencillamente la diputada y actual presidenta del Congreso sabe cómo hacer política y no nada más grilla, como la mayoría de sus colegas legisladores que aunque sean de la misma bancada, están más alejados que el cielo y el infierno.
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Si de expriistas, morenos y tricolores se trata, en donde volvieron a encenderse las alarmas ante una posible desbandada, oootra de tantas, aunque ya casi ni quede nada en las filas de la familia revolucionaria, es ahí, al interior de lo que queda del PRI Estatal, y es que la bronca que se trae el dirigente nacional, ‘Alito’ Moreno con el senador Miguel Ángel Osorio Chong y con otros militantes “distinguidos”, han puesto a dudar al líder estatal Alex Domínguez, a quien no le quedó de otra que pedir “prudencia” a la militancia que se siente a disgusto con ‘Alito’, quien hay que decirlo, desde que asumió las riendas del tricolor nomás no da una y ha terminado por sepultar lo que quedaba de la familia revolucionaria.
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Así como el diputado con licencia Mario Vázquez se ha aplicado de lleno a su labor al frente de la Secretaría de Obras Públicas, otra legisladora que pidió licencia para irse junto con él al Gabinete de la gobernadora Maru Campos y que también se tomó en serio su chamba al frente de la Secretaría de Desarrollo Humano es Carla Rivas, quien ya logró la rehabilitación del albergue de la comunidad de San José de los Valenzuela, allá en el municipio de Batopilas, un encargo prioritario que le hizo la Góber y que por lo pronto el jale ya salió para beneficio de esa zona que actualmente es foco rojo respecto a los índices de desnutrición y pobreza, pues aunque todavía falta mucho por hacer para abatir ese atraso, al menos ya existe la voluntad de trabajo en quienes deben de mover los hilos para abatir esas terribles situaciones de precariedad.
Source: Columna