Aguas negras-Relaciones judiciales-Peje colmilludo-CFE en la fila

PUES YA MÁS claro ni el agua que deberá salir en los próximos años, con eso de que la Junta Municipal de Agua y Saneamiento entregará las concesiones para que sean empresas las que administren las plantas tratadoras que existen en la capital del estado, además, con el compromiso de que se construya una tercera, eso sí, con el presupuesto de la dependencia estatal que será comprometido dentro de los próximos 10 años, tan es así que nos enteramos que son ocho los finalistas en esta lucha por “purificar” lo que nació un tanto sucio desde el año pasado en el Congreso local, cuando se permitió que los privados le entraran al negocio del agua tratada, novelón que culminará en febrero, cuando se sepa quién fue el ganón del negocio, si la Suprema Corte de Justicia de la Nación no ordena otra cosa, con eso de que le dio entrada al amparo interpuesto por diputados de Morena para impedir lo que ellos consideran la privatización del agua.

Pero mientras sean líquidos o sólidos los argumentos, las empresas que andan acariciando el negocio son Grupo Suez; Veolia; Ecoalia; Hermes; Fypasa y por supuesto Atlatec, la cual ya tuvo las concesiones en años pasados y desde la época del exgobernador panista Pancho Barrio, además de que durante la rebatinga en el Congreso, se le vinculó con empresarios locales ligados al PAN, sin embargo, hoy dicen sus defensores que Atlatec fue adquirida por el gigante japonés Mitsubishi, tan así que actualmente le brinda servicio de tratamiento de aguas residuales al gobierno de la Ciudad de México, a donde llegó durante la administración de Miguel Ángel Mancera. Sea como sea, el nombre ahí está, sigue siendo el mismo y los vínculos azules no han desaparecido.

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YA QUE ANDAMOS por terrenos judiciales, nos cuentan que esta semana el que agarró camino hacia la ciudad de Guadalajara, Jalisco y luego tocará base en la CDMX, es el presidente del Poder Judicial de Chihuahua, Pablo González, quien al parecer tuvo agenda de acercamiento político con magistrados y hasta ministros (dependiendo la sede) del Poder Judicial de la Federación.

Dos cosas interesantes, si don Pablo anda estrechando vínculos con el tribunal tapatío encargado de dar prácticamente la última palabra en materia electoral, las cosas se andan adelantando demasiado, y dos, dicen los malosos que ya era hora de que alguien finalmente tendiera los puentes casi inexistentes tanto con la Judicatura Federal como con la Suprema Corte que Chihuahua requiere en la antesala de la resolución de conflictos judiciales de primer nivel como las controversias constitucionales en curso y las revisiones de amparos garantistas en contra de las decisiones que en los últimos dos años han generado escozor local.

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AUNQUE PAREZCA INSÓLITO, la batalla que inició el presidente Andrés Manuel López Obrador en contra del huachicoleo en la zona centro sur del país, trae su popularidad y la de Morena por las nubes, eso sí, acá en el norte, en donde todavía quedaban muchos resquicios de duda hacia el tabasqueño desde su triunfo en las elecciones del 1 de julio del año pasado, sin embargo, con eso de que acá en Chihuahua la escasez de combustible ha sido nula, un amplio sector de la ciudadanía trae entre ceja y ceja al PAN y al PRI, considerando a ambos partidos como los hacedores de la corrupción al interior de Pemex.

Vaya, El Peje, largo y colmilludo como él solo, ha sabido matar dos pájaros de un tiro con su lucha contra los huachicoleros, elevándose sus bonos y también los de los morenos, y a su vez perjudicando a sus adversarios grillos, sin embargo, sus mismos seguidores advierten que deberá conducirse bajo las misma tónica, pues un paso en falso y entonces sí el tiro le saldría por la culata.

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Y PRECISAMENTE PORQUE en los próximos meses esa será la estrategia del presidente López Obrador, es decir, limpiar las paraestatales y dependencias federales, los malosos aseguran que se viene la Comisión Federal de Electricidad y ahí sí, Chihuahua saldría más que embarrado en las turbulentas aguas de la corrupción oficialista. Los que más saben deslizaron que podrían salir a flote los acuerdos que el exgobernador César Duarte presumió una y otra vez, por allá del 2014, con el entonces titular de la CFE, Pedro Joaquín Coldwell, cuando juró y perjuró que a los chihuahuenses les llegaría el recibo de la luz en ceros, además, ahí no terminaría todo, ya que las falsas promesas de varios gobiernos de regularizar los adeudos del sector agrícola, también flotarían en las presuntas corruptelas.

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POR CIERTO, TÓMELO con reservas, pero la información ahí está; resulta y resalta que desde la cúpula no tanto de Morena, pero sí del gobierno federal, que es algo muy cercano, Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, estaría de nueva cuenta en el estado de Chihuahua a mediados de febrero para arrancar un par de obras en la zona occidente, es decir, Cuauhtémoc y sus alrededores.

De ser cierta la versión que anoche circuló en torno a los lopezobradoristas locales que inciden en el centro del Pais, AMLO le anda rodeando demasiado a la capital del estado, y esos mensajes no necesariamente son buenos para la clase política que domina el escenario actual en estas norteñas tierras. Se espera que la información pueda formar forma la próxima semana. Pero de que la agenda presidencial marca nuevamente a Chihuahua, de eso no hay duda.

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QUE MARCELO GONZÁLEZTachiquín, el exsecretario de Educación de César Duarte, sabe bastante y conoce a fondo el accionar de su exjefe en el Gobierno del Estado, es lo que se dice en los corrillos leguleyos, y esa, dicen los que saben, podría ser una poderosa razón para que el excatedráticopueda negociar su libertad con sus declaraciones, pues aunque por casi dos años se presumió que Tachiquín era testigo protegido, lo cierto es que su detención demostró lo contrario, sin embargo, todavía le queda esa opción para negociar su salida, será por eso que a diferencia de otros priistas detenidos por sus nexos con Duarte Jáquez, al también exdirector de Pensiones le otorgaron un período menos amplio para el desarrollo de las investigaciones después de sus dos vinculaciones a proceso.


Source: Columna