SALVADO POR LA campana, y por la campana del Senado, es lo que le pasó al dirigente del PRI Estatal, Omar Bazán, pues de último momento, la presidenta del Comité Ejecutivo Nacional de partido tricolor, Claudia Ruiz Massieu, canceló la visita que tenía programada para hoy en las oficinas de la colonia Dale, en donde primero ofrecería una rueda de prensa y después se reuniría con la militancia de la familia revolucionaria, sin embargo, el despapaye que trae Bazán Flores al interior de la dirigencia, provocó que la senadora pospusiera su llegada y utilizara de excusa la sesión de hoy en la Cámara Alta.
Pero como nuestro pecho no es bodega y el de los malosos tampoco, se supo que la verdadera razón por la que Ruiz Massieu canceló su visita, es ni más ni menos que porque el líder priista trae a casi todos sus antecesores en la silla tricolor encima, y es que al legislador ni siquiera se le ocurrió, o más bien no quiso, invitar a los exdirigentes del CDE, tales como Memo Dowell, Karina Velázquez, Alex Domínguez o Lupita Pérez, por mencionar algunos, ya que todos ellos se le indigestan y prefirió hacer de las suyas e intentar manipular a los de arriba, pues durante el evento con la militancia ya se estaba gestando una revolución que prometía derrocarlo y exhibirlo como un dictador priista. Tremenda suerte la de Omar, aunque aseguran que todo es cuestión de tiempo…
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ESCASOS MINUTOS DESPUÉS de reunirse en Palacio de Gobierno en sesión de la Mesa de Seguridad, el gobernador Javier Corral se enteraba de la ejecución de Gregorio Martínez, “El Jefe Goyo”, como se le conocía en las filas de la policía estatal, demostrándole al góber que ante el embate del crimen organizado, no existe encuentro que valga y que sus estrategias, sean cuál sean hasta ahora, son fallidas y promueven un estado que se encuentra en llamas por la inoperancia y el crecimiento incesante del narcotráfico. Así, con la muerte de un jefe policíaco, los delincuentes les volvieron a demostrar al mandatario quiénes mandan en la entidad. Lo increíble, es que después del Desfile Revolucionario, Corral Jurado afirmó que no se subordinaría al Ejército como lo quiere Andrés Manuel López Obrador, vaya, como si el horno no estuviera para bollos y la crisis latente, el gobernador se pone sus moños.
Y es que esta semana ha sido crítica para las corporaciones estatales, tanto para la Fiscalía y la CES, pues mientras Javier Corral y el PAN rechazan la estrategia que habrá de implementar el presidente electo apenas y tome protesta, las instalaciones de la Fiscalía y las fuerzas estatales son atacadas, los agentes caen y ellos buscando tajada grilla del sufrimiento de los demás. Lo inconcebible es que con la amenaza latente y los criminales respirándoles en el cuello, trascendió que los altos mandos de la policía estatal han rechazado el apoyo de los agentes municipales de Juárez, a pesar de que son ellos, los polis de la SSPM, los que últimamente han logrado capturar a los sicarios que atacan a los elementos de la CES.
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MIENTRAS ESO SUCEDE con la narcoviolencia, el Gobierno del Estado anda más ocupado en pugnas políticas y persecuciones, tan es así que los malosos aseguran que de ahí, del edificio de cantera ubicado en las calles Aldama y Carranza, provienen recursos para que asociaciones como Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad, que dirige el no siempre tan bien ponderado empresario, Claudio X. González, publiquen investigaciones contra el exsecretario del CEN del PRI, Alejandro Gutiérrez, la famosa “Coneja” que hoy goza de libertad condicional, en las cuales ensalzan la lucha del gobernador Javier Corral contra la corrupción, la priista claro, la de sus enemigos políticos, porque la propia, la que se gesta en Palacio y es azul, esa no es vista por los paladines de la justicia corralista.
Source: Columna