Contradicciones-Azules en pugna-Agenda de transición-Lo desmienten… otra vez

PRIMERO DIJO QUE una expulsión del PAN le representaría una oportunidad, pero el gobernador Javier Corral ya cambió de opinión y ahora afirma que “dará la batalla” cuando se le llame a cuentas por operar en contra de la candidata panista y hoy gobernadora electa, Maru Campos, pues según él, no hizo nada malo en contra de Acción Nacional y para demostrarlo, por fin hablará de todo lo que sabe, es decir, ahora que la expulsión la vio más de cerca y la propuesta de sancionarlo a él y a los pocos aliados que le quedan, ya está en la cancha del Comité Ejecutivo Nacional, Corral se ha puesto en su pose de evitar ser expulsado, y si eso sucediera, dirá que se va por sus pistolas, y es que aunque la mayoría de los chihuahuenses terminaron por aborrecer su administración, él supone que todavía es presidenciable para el 2024 y en una de esas podría ser a través de Movimiento Ciudadano. Que lo compre quien no lo conoce.

Pero mientras tira sus últimas patadas de ahogado, este lunes deberá estar en la Ciudad de México para reunirse con Andrés Manuel López Obrador, con quien además de hablar de la supuesta lucha anticorrupción y de billetes requeridos para cerrar su administración, seguramente también habrán de grillar largo y tendido, sobre todo porque el candidato favorito de ambos, el morenista Juan Carlos Loera, perdió la contienda ante su odiada Maru Campos. Por lo que no dude que entre el todavía Góber y el tabasqueño, intenten por última vez doblegar la voluntad del electorado chihuahuense, electores que les propinaron una lección a ambos, cuya sed de venganza es lo único que los mueve.

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NOS CUENTAN LOS malosos que los dirigentes municipales del PAN en Juárez y Chihuahua, Joob Quintín y Paco Navarro, tienen una relación institucional, buena, cordial, de cuates, pero sin ser amigos. Ahora resulta que las circunstancias y momentos de la política los enfrentan en la posibilidad, de ambos, para ocupar la presidencia estatal del bolillazo.

Los dos hicieron la tarea. El resultado ganador fue en Chihuahua capital, pero las condiciones electorales entre Juárez y aquí no tenían parangón. Aún así el equipo de Paco Navarro entregó cuentas positivas: carro completo y en la frontera apernas dos diputaciones, una local y otra más federal y párale de contar.

Quien decidirá esto es la propia gobernadora Maru Campos. No es una urgencia. Será como una extensión del gabinete estatal allá por el mes de octubre. Después de que las aguas en Palacio de Gobierno empiecen a tomar su normalidad. Hoy se encuentran rebotadas.

Luego, para variar, vendrán las repercuciones en las dirigencias municipales. En ese rubro será el alcalde Marco Bonilla quien lleve la batuta en la ciudad de Chihuahua y algunos regidores ya andan inquietos. Es la danza de las posiciones. Por lo pronto la lucha por las Direcciones es el pan de cada día. Lo que no saben es que la sábana santa ya se encuentra confecionada y Bonilla está en ajustes finales, enfocado en la generación de financiamientos internacionales para proyectos macros. Pronto lo veremos en Estados Unidos y Europa gestionando chelines de fondos ajenos al contentillo presidencial de Andrés Manuel López Obrador para materializar inversión extranjera directa en Chihuahua capital. No se trata de traer maquiladoras, sino de generar confianza en entidades públicas y privadas del concierto internacional de las naciones, para arrancar proyectos a mediano y largo plazo en materia de acompañamiento institucional e inyección decidida en proyectos de infraestructura macros.

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CON TODO E impugnaciones, así como estrategias cuatroteras para dilatar la transición gubernamental en el estado, ésta debe continuar y para eso está el equipo de transición de la gobernadora electa Maru Campos, el cual encabeza Luis Serrato. Y es que tal como le dimos a conocer en estas líneas en días pasados, la próxima semana se reunirán con la secretaria de la Función Pública, Mónica Vargas, sin embargo, no todo termina ahí, pues al día siguiente, Serrato y el equipo de Maru sostendrán otro encuentro con el secretario General de Gobierno, Luis Fernando Mesta, quien se ve que sufre con las reuniones, luego de que él sí fuera “leal” a Javier Corral y por tanto le tirara con todo a Maru Campos, razón por la que dicen que Mesta Soulé también integra el paquete de panistas resentidos a los que sancionarían.

Pero retomando las reuniones de transición y ante la violencia que impera en el estado, el equipo de la gobernadora electa ya se meterá de lleno con el asunto de la seguridad, tan urgente y prioritario para Maru, es así que jueves y viernes de la semana que entra, Serrato y sus colaboradores buscarán al secretario de Seguridad Pública, Emilio García Ruiz, y por supuesto al fiscal César Peniche, quien muy seguramente no estará nada contento de verlos, pues en él recayó esa encarnizada persecución que se aventó Corral en contra de su compañera de partido y la que en septiembre será su sucesora.

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EL QUE DEMOSTRÓ que Andrés Manuel López Obrador miente como respira, es el activista Adrián LeBarón, padre y abuelo de la mayoría de las víctimas de la masacre ocurrida el 4 de noviembre en los límites de Sonora y Chihuahua, y es que LeBarón afirmó que aunque AMLO celebre que prácticamente todos los involucrados en la matanza han sido detenidos, lo cierto es que todavía faltan como 80 sicarios que participaron en el asesinato de nueve mujeres y niños de esa comunidad mormona que habita en la región noroeste de Chihuahua y en el noreste del vecino estado de Sonora, así que aunque el tabasqueño se jacte de que en México no existe impunidad, eso solamente ocurre en su cabeza, en un país de ensueño, el mismo que describe de lunes a viernes durante sus “mañaneras” y que está tan, pero tan alejado de la realidad, que el inquilino de Palacio Nacional tiene que repetirlo una y otra y otra vez, para continuar poniéndoles el dedo en la boca a sus seguidores.


Source: Columna