A MÁS TARDAR en dos semanas, el Tribunal Estatal Electoral dará su fallo respecto al resultado de la elección en Juárez, en donde tras el reconteo de votos el triunfo se lo llevó el candidato de la coalición Juntos Haremos Historia, Javier González Mocken, por encima del alcalde de esa ciudad y aspirante independiente, Armando Cabada, cuyo equipo se inconformó ante el resultado a escasos minutos de que cerrara el plazo, sin embargo, lo cerrado de la misma, una diferencia de casi mil sufragios, trae en vilo a los involucrados y que a decir de los malosos, los traerá unas semanitas más, pues a pesar de lo que diga el TEE, lo más seguro es que quienes definan lo que sucederá en la frontera sean los magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
Pero mientras eso sucede y los protagonistas grillos se disputan la Presidencia Municipal, los que están aprovechando ese vacío de poder y continúan disputándose el control del trasiego y venta de drogas, son los narcos y sicarios que traen asoladas las calles de Juárez, y es que desde mayo a la fecha, el incremento de la violencia en la fronteriza ciudad ha alcanzado niveles del 2010, cuando abiertamente se libraba una narcoguerra que posicionó a Juárez como la más violenta del mundo, lo cual amenaza con extenderse, al menos hasta que los políticos se definan y pongan más atención en la seguridad de los juarenses, que en los resultados de una elección que ya debió haberse dado por concluida.
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LOS QUE TAMBIÉN emprendieron una pugna interna que trae a más de diez parados de pelos y pestañas, son las dos tribus panistas que buscan quedarse con el control del Comité Directivo Estatal tras el triunfo o derrota a medias (depende del cristal con que se mire) que dejaron las elecciones del 1 de julio, y es que mientras los del gobernador Javier Corral quedaron descalabrados, los que salvaron la dignidad del PAN, llámense los del grupo político de la alcaldesa electa de la capital, Maru Campos, no ven con buenos ojos la continuidad del proyecto corralista en la dirigencia azulada.
Es por ello que ya comenzaron a saltar nombres para suceder a Fernando Álvarez Monje, cuyo accionar en el proceso electoral no dejó contento ni a su protector, el góber Corral Jurado, tan es así que por ese lado de Palacio de Gobierno, se mencionan a Rocío Reza y Pepe Luévano como los gallos corralistas, a pesar de que la primera salió derrotada en las urnas hace cuatro semanas, mientras que por el lado de los panistas de cepa que encabeza Campos Galván, salieron nombres como el de Marco Bonilla, actual alcalde suplente, así como los de Mario Vázquez y Arturo García Portillo, operadores estrella de la presidenta municipal con licencia y también electa.
Por cierto que en el establo del Nuevo Amanecer también barajan el nombre del doctor Jorge Issa, actual mandón administrativo en el Congreso del Estado, quien como buen padrino político de quien será el próximo coordinador de la bancada panista, Fernando Álvarez Monge, buscan que el chaval le deje las riendas del partido a su mentor y nuevo padrino político. Al final del día el nombramiento de Secretario Administrativo en la Torre Legislativa para el doc deliciense, vendrá a convertirse en un problema dentro de 30 días, cuando la Legislatura local cambien y las fuerzas partidistas presenten una balanza donde Morena será actor preponderante, a diferencia de lo que ahora es, y donde lógicamente buscará posiciones que hoy solamente dispone Acción Nacional.
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YA QUE MENCIONAMOS a la alcaldesa Maru Campos, los malosos confirmaron que al concluir la primer semana de agosto es cuando la reelecta edil capitalina retomará las riendas del Ayuntamiento, e iniciará con los ajustes de cara, primero a la renovación del partido azul que vivirá de aquí a diciembre una transformación completa desde la dirigencia nacional hasta las municipales, y luego para preparar su presentación del Segundo Informe de labores y prácticamente de inmediato su rendición de protesta para el siguiente periodo, donde de entrada se ratificarán al 90 por ciento de los funcionarios de primer nivel de su administración. Los relevos se esperan en lo que será un nuevo apriete de tuercas al interior del gobierno que encabezará Campos Galván.
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QUIEN DE PLANO no se baja de su macho y al igual que su jefe inmediato, tiene el don de la terquedad, es el secretario de Salud del Gobierno del Estado, Ernesto Ávila, del cual se ha especulado infinidad de veces su salida de esa dependencia que ya se convirtió en un cúmulo de intereses privados y empresariales, y es que por más que se ha mencionado que se va, lo cierto es que el gobernador Javier Corral también está montado en ese macho que ha impedido los enroques necesarios, dentro de una administración estatal que aún no cumple los dos años, cuando ya parece un barco a la deriva y con el crédito político agotado.
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VAYA, VAYA, QUIEN reapareció en la Ciudad Judicial y no precisamente como juzgador o magistrado, es el juez Willy Gómez, famoso por golpear a su hermana y amenazar al que se le ponga enfrente, y es que el tristemente célebre personaje oriundo de Jiménez, estuvo presente como abogado defensor de Sergio Medina, exfuncionario priista y vinculado a César Duarte, lo que sin duda llamó la atención de los que acudieron a la audiencia, una de tantas, del exdirector de Adquisiciones de la Secretaría de Hacienda, acusado de peculado en agravio de las arcas estatales.
Source: Columna