Después de más de seis décadas de haber sido creados, Stanley Weston está tratando de recuperar de manos de Hasbro, Inc., los derechos de autor que afirma poseer sobre los personajes de G.I. Joe, informa Hollywood Reporter.
Weston ha presentado una notificación de terminación a Hasbro, Inc., que adquirió los derechos de GI Joe, utilizando una reforma de la legislación sobre derechos de autor que permite al creador o a sus herederos revertir la cesión de derechos de autor después de 35 años.
En la demanda se afirma que en 1963 Weston tuvo “la idea original de la fabricación y venta de figuras de acción que usan y llevan versiones en miniatura de los uniformes, insignias , emblemas y equipos de cada una de las diferentes ramas de las fuerzas armadas de Estados Unidos”.
Weston presentó el proyecto a Donald Levine, Vicepresidente de Investigación y Desarrollo de Hassenfeld Bros., Inc., que después se convertiría en Hasbro.
Como Westom no tenía la capacidad para producir los prototipos celebró un acuerdo con Hasbro para que este lo hiciera con base a los diseños que el aprobara.
Weston afirma que acordó con Levine pagar cualquier gasto relacionado con la fabricación de los prototipos, pero Levine dijo que la empresa recuperaría cualquier gasto al momento de fijar el precio por la compra de los derechos de Weston.
Weston estuvo de acuerdo, sin embargo, estableció que si no vendía a Hasbro los derechos, les reembolsaría cualquier gasto en que hubieran incurrido para crear los prototipos de las figuras. “Por lo tanto, Weston asumió la carga de cualquier gasto” concluye la demanda.
Con estos argumentos Weston está dando a entender que lo que hizo Hasbro para crear los juguetes de G.I. Joe fue un trabajo por encargo, siendo él el autor legal del producto final. Con los años, los juguetes han sufrido alteraciones pero en la demanda se argumenta que siguen siendo “sustancialmente similares” a la idea original de Weston.
Por desgracia el caso se complica por que al parecer ninguna de las partes cuenta con el contrato original celebrado en 1964, en el que se cedieron los derechos a la empresa y se establecieron las condiciones para ello.
Fuente: Hollywood Reporter