Kim Kardashian, al igual que toda su familia, vive de su imagen y le encanta alardear sobre su estilo de vida lleno de lujos y excentricidades. Sin embargo, la celebrity sufrió un gran bajón a nivel estético cuando se quedó embarazada de su último hijo, Saint West, ya que engordó 32 kilos. Tras dar a luz, se propuso perder todos esos kilos y lo ha conseguir en un tiempo récord.
Durante los últimos años, la mujer de Kanye West ha estado luchando para recuperar aquella silueta que la hizo famosa en el inicio del reality ‘Keeping Up with the Kardashians’. Sin embargo, ¿a qué precio?. ¿Resulta saludable perder tantos kilos en tan poco tiempo?. Esto se ha hecho evidente tras la publicación de una foto en su perfil de Instagram en la que aparece con un bañador muy escotado y mucho más delgada.
Kim Kardashian, al igual que toda su familia, vive de su imagen y le encanta alardear sobre su estilo de vida lleno de lujos y excentricidades. Sin embargo, la celebrity sufrió un gran bajón a nivel estético cuando se quedó embarazada de su último hijo, Saint West, ya que engordó 32 kilos. Tras dar a luz, se propuso perder todos esos kilos y lo ha conseguir en un tiempo récord.
Durante los últimos años, la mujer de Kanye West ha estado luchando para recuperar aquella silueta que la hizo famosa en el inicio del reality ‘Keeping Up with the Kardashians’. Sin embargo, ¿a qué precio?. ¿Resulta saludable perder tantos kilos en tan poco tiempo?. Esto se ha hecho evidente tras la publicación de una foto en su perfil de Instagram en la que aparece con un bañador muy escotado y mucho más delgada.
Algunos medios especulan que probablemente Kim Kardashian ha recibido la ayuda de un cirujano durante todo este proceso ya que durante su primer embarazo acudió a un experto y invirtió más de 80.000 dólares en tratamientos estéticos.
Vanguardia