Años después de la rehabilitación

Estas son algunas imágenes de lo que algún día fue uno de los centros de rehabilitación que dejaron huella en la época de la narcoguerra con dos ejecuciones al exterior, así como un lugar donde hubo una víctima mortal por el maltrato físico que ahí recibían jóvenes con problemas de adicciones. Ahora este sitio es inhabitable, se encuentra en la calle 29 numeral 2203 de la colonia Obrera.

Datos periodísticos recuerdan que fue el 17 de febrero de 2011, Luis Cortés Ovalle, El “padrino”, fue detenido por el asesinato de un adicto en recuperación, Eduardo Almeida Rodríguez de 18 años de edad.  Acusado de propinarle “terapias” a golpes alegó que se le pasó la mano el 5 noviembre de 2010, pero cuando fue detenido había dicho que el joven en rehabilitación había resbalado en los baños que se muestran en las imágenes.

Fue poco tiempo después en que las instalaciones de este Centro de Rehabilitación, denominado AMAR, decidió cambiar de ubicación, tras el escándalo de este asesinato.

Por otro lado vecinos del lugar aún recuerdan que fue durante épocas de violencia, cuando dos hombres fueron ejectuados a unos cuantos metros de este centro. Ambos también pertenecían a este sitio, pero el día en que fueron ejecutados no estaban al interior.

Actualmente, el lugar se encuentra deshabitado, cambió de propietarios, por lo que platicaron a Entre Líneas que este ahora es un lugar del cual requiere una costosa remodelación para poder volverlo hacer habitable o de utilidad.

Todavía se pueden percibir objetos que dejaron quienes se hacían cargo del lugar. El área de los dormitorios, era un piso de cemento; en el techo se pueden ver los ductos del aire por lo que en tiempo de frío, eran más las bajas temperaturas al interior.

De acuerdo a testimonios, vecinos aseguran que en el lugar se escuchan ruidos, tal y como si alguien aún estuviera dentro y golpeara la pared. Los ahora propietarios, compartieron que en una de las habitaciones encontraron huellas de una persona descalza, pero estas se encontraban alrededor. Es así que este lugar del cual se compró desde 2012, no ha podido ser habitable pues aseguran que aún persisten energías que con el tiempo deben limpiar.

Centros de rehabilitación y sus historias

Ésta, tan sólo fue una de las historias que han quedado en lugares encargados de rehabilitar a personas con problemas de adicciones sin importar la edad o status social.

Han pasado ya más de tres años cuando Chihuahua capital vivió el horror -según se comprueba en los periódicos-.

12 de junio de 2010.  Más de 25 sicarios armados con rifles AK-47 y R-15 atacaron el centro de rehabilitación Fe y Vida, que se encuentra en la colonia Villa Nueva de esta capital, y dieron muerte a 19 personas y lesionaron a dos de gravedad. Hubo seis sobrevivientes.

En 2013, al interior del Instituto Formativo de Atención a las Adicciones (IFAA), ubicado en las calles Morelos y Segunda, ocho menores de edad fueron violados y abusados sexualmente. Actualmente las instalaciones de este lugar ya no existen.

Abril 2014. El director del centro de rehabilitación “Unidos por un Nuevo Amanecer” y un interno sufrieron un atentado a balazos, por lo que fue el directivo de este lugar quien perdió la vida.