Elementos de la Policía Estatal Única División Preventiva estarían dispuestos a ir a un paro laboral debido a los malos tratos y humillaciones a los que han sido sometidos tras la llegada de los nuevos mandos, provenientes de las filas de la Policía Federal (PF).
De acuerdo a testimonios de los agentes, los nuevos jefes cambian los días de descansos injustificadamente y los envían a la Sierra u otras zona a pie o en sus vehículos particulares, lo cual los ha dejado exhaustos y desmoralizados.
En particular, los oficiales señalan comandante de la División Preventiva, Álvaro Serrano Escobedo, por su supuesta actitud prepotente y grosera, así como a sus allegados, el comandante Hernández y el oficial Sigala, quienes nunca salen de la oficina y trabajan de lunes a viernes.
Hasta el momento, la Fiscalía General del Estado no ha emitido un posicionamiento sobre este asunto, ni se han presentado denuncias concretas por los abusos cometidos por los mandos de la Policía Estatal.