coche bomba estalló el martes cerca de un autobús de la policía en el centro de Estambul durante la hora punta de la mañana, dejando 11 muertos y 36 heridos cerca de la principal zona turística, una importante universidad y la oficina del alcalde de la ciudad turca.
Tres de los 36 heridos se encuentran en estado crítico.
El vehículo fue detonado cuando pasaban autobuses de la policía, dijo a la prensa el gobernador de Estambul, Vasip Sahin, en el cuarto atentado importante este año en la ciudad más grande de Turquía.
Un ataque con coche bomba fue llevado a cabo contra vehículos que transportaban a nuestra policía de respuesta rápida y que pasaban por la calle, lo que resultó en la muerte de siete policías y cuatro civiles”, dijo Sahin.
Nadie se atribuyó de inmediato la responsabilidad, pero milicianos kurdos han protagonizado ataques similares, incluyendo uno el mes pasado en la misma ciudad.
En esa línea, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, acusó a los rebeldes kurdos de estar detrás del ataque.
No es nuevo que la organización terrorista (denominación oficial del PKK) propague sus ataques en las ciudades”, declaró Erdogan ante la televisión después de visitar a unos heridos ingresados en un hospital de la ciudad.
La explosión se produjo en el distrito Vezneciler, entre la sede del municipio local y el campus de la Universidad de Estambul, no muy lejos del centro histórico de la ciudad.
El estallido rompió escaparates y esparció escombros sobre las calles cercanas.
ATAQUES CONSTANTES
Desde hace varios meses, Turquía vive en estado de alerta por una serie inédita de atentados atribuidos al grupo yihadista Estado Islámico o relacionados con la reanudación del conflicto kurdo.
Dos atentados suicidas golpearon ya zonas turísticas de Estambul, y fueron atribuidos a la organización Estado Islámico.
El 19 de marzo, un suicida se hizo estallar en una arteria comercial del centro de Estambul, matando a cuatro turistas extranjeros, entre ellos tres israelíes y un iraní.
En enero, otro atentado suicida, igualmente atribuido al EI, mató a doce turistas alemanes en el centro histórico de la ciudad, la más grande de Turquía.
Sin embargo, cuando se trata de ataques contra las fuerzas de seguridad, las autoridades suelen apuntar a los rebeldes kurdos, enfrascados en combates contra el ejército en el sureste del país.
En abril, Estados Unidos advirtió a sus ciudadanos de la existencia de “amenazas creíbles” de atentados contra los turistas en Estambul y Antalya (sur).
Los atentados han dañado el sector turístico turco, con una caída del número de visitantes del 28% en abril de este año respecto al mismo mes de 2015, según datos del gobierno. La caída mensual fue la mayor en 17 años, y preocupa a medida que se acerca la temporada de verano.
Turquía, miembro de la OTAN y de la coalición antiyihadista liderada por Estados Unidos en Irak y Siria, parece haber intensificado sus operaciones contra el EI en el norte sirio, donde los extremistas controlan numerosas zonas fronterizas.
Según algunos analistas, eso hace que el país sea más vulnerable ante el riesgo de atentados.
fuente: excélsior