Javier Benavides González, designado como encargado provisional de la Policía Estatal Única por el gobernador Javier Corral Jurado, descartó tener vínculos con el crimen organizado, como se ha mencionado en diversos medios de comunicación a raíz de algunos artículos publicados en el año 2000 por la Revista Semanario, entonces dirigida por quien fuera el coordinador de comunicación del nuevo mandatario, Antonio Pinedo Cornejo.
Benavides González refirió que hace 16 años se publicó en dicha revista un reportaje titulado “Historia de policías y narcos”, escrito por Luis Villagrana y Pinedo, en el que se denunciaba su presunta vinculación con el crimen organizado cuando ostentaba el cargo de Comisionado de Seguridad Pública en Ciudad Juárez.
En la publicación, los autores retomaron las declaraciones de Martín de Arce Botello, ex teniente de la Policía de Ciudad Juárez y de Rosa María Lardizábal, hermana del ex agente de la Policía Estatal Javier Lardizábal alias “El negro”, mismas que, sin fundamento, fueron utilizadas para acusarlo.
En el primer caso, Benavides detalló que, como comisionado, cesó a Martín de Arce por contar con 13 reportes en su contra por distintos motivos, entre ellos robo, lesiones, abuso de autoridad, allanamiento de morada y hostigamiento, los cuales fueron recibidos desde 1993 hasta 1999. Explicó, además, que el ex teniente fue aprehendido en diversas ocasiones en posesión de drogas, específicamente cocaína, lo cual quedó constatado en diversas publicaciones.
Por otra parte, Rosa María Lardizábal, relacionó a Benavides con en el “levantamiento” y asesinato en 1993 de su hermano “El Negro” Lardizábal, por haber sido la última persona que lo vio con vida.
Por este motivo, Benavides decidió interponer una denuncia por difamación en contra de Pinedo y Villagrana, la cual culminó con el encarcelamiento de ambos al haber sido hallados culpables. Sin embargo, les otorgó el perdón luego de que el entonces secretario general de Gobierno, Víctor Anchondo, le hiciera esta solicitud, a cambio de que el Gobierno del Estado confirmara que no existía ninguna averiguación en su contra y de que los periodistas reconocieran que sus acusaciones no tenían sustento.
Finalmente, el director provisional de la PEU subrayó que los recientes señalamientos en su contra tienen la intención de dañar la imagen de la Policía y del nuevo Gobierno ante el reordenamiento que se avecina en la misma corporación, pues pasaron 16 años para que este tema volviera a salir a luz cuando incluso fungió como director de Seguridad Pública en Delicias sin que nada de esto se mencionara.
“Como responsable de la Policía Estatal es fundamental velar por la confianza de la ciudadanía en la institución, una relación que ha sido lastimada por años de opacidad y lejanía, por eso tengo el interés de realizar este ejercicio de transparencia frente a la prensa, es esencial a nivel personal velar por mi nombre, mi honor y el de mi familia… He desempeñado múltiples responsabilidades a lo largo de estos años y es precisamente en este momento que reaparecen artículos basados en publicaciones que fueron probadas como falsas en su momento, y que ningún medio consideró relevantes cuando yo era director de Seguridad Pública en ciudad Delicias… es extraño, sería ingenuo ignorar la intención de dañar la imagen de la Policía Estatal y del nuevo gobierno”.