A Joaquín Guzmán Loera, “El Chapo”, no le satisfacen las condiciones carcelarias en las que se encuentra.
Ahora, le molesta la celda que le asignaron en el Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) número 9 de Ciudad Juárez, Chihuahua, adonde lo trasladaron de penal del Altiplano el pasado sábado.
La celda es “sucia y fea”, expresó el líder del cártel de Sinaloa, según lo indica su abogado Andrés Granados Flores.
Para este fin de semana, se espera que el capo reciba a su esposa, Emma Coronel, aunque no se sabe si la estadounidense acudirá con sus hijas gemelas.
“Joaquín se queja de que la celda está sucia y quiere que las condiciones sean más favorables para los miembros de su familia, ya que ahora requiere más esfuerzo para verlos”, señaló Granados Flores.
De acuerdo con La Jornada, el abogado relató que vio a su cliente el pasado domingo y le informó de los amparos obtenidos, uno para que no lo extraditen y otro para que lo regresen al penal del Altiplano, en el estado de México.
También se mantienen dos solicitudes de amparo en los juzgados locales de distrito para frenar la extradición y el aislamiento. Pero dijo que el capo vive en la incertidumbre por la posibilidad de ser extraditado sin autorización, pese a los amparos conseguidos.
Fuente: SDP Noticias