Actualmente la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) se encuentra finalizando el análisis solicitado por la Secretaría de Economía para arrancar la explotación del yacimiento minero que se tiene en el área de Samalayuca, al cual se han enfrentado ciudadanos mediaticamente por las posibles afectaciones que tendrá a las especies naturales.
El secretario de economía, Manuel Russek Valles, informó que la Comisión se encuentra actualmente analizando la problemática, por lo que las autoridades comenzarán con una consulta ciudadana, la cual es necesaria para ingresarla y completar el expediente sobre este caso, agregando que después de todo esto se tendrá la autorización para explotar el yacimiento.
Este proyecto es de una empresa canadiense, mismo que se encontró en sigilo por algunos años debido a las complicaciones para obtener los permisos, derivado de la protección que tiene la zona como reserva natural, según han denunciado diversos activistas en contra de la explotación minera en el área.
Cerca de las inmediaciones donde se instalará la planta minera se encuentra el sitio arqueológico Los Petrograbados de Samalayuca, según posicionaron en las redes sociales los defensores de las tierras naturales, agregando que aunque se mencionó que no se intervendría en el área abierta a público se entiende que un sitio arqueológico no es solamente el área pública sino el espacio que fue utilizado por antiguos pobladores.
Con lo anterior se señala que “esto involucra igualmente el contexto natural del cual formaron parte los grupos cazadores recolectores”, explicando que la explotación en dichas tierras involucrará un daño y alteración del paisaje que conforma el desierto chihuahuense.
La minería en el territorio estatal y nacional
La Cámara Minera de México (Camimex) ha señalado que el 70 por ciento del sector minero mexicano se encuentra en manos de las empresas extranjeras, en especial de inversionistas canadienses.
Al medio La Jornada se le indicó que tan solo el 30 por ciento de la minera mexicana pertenece a los mexicanos, controlando los extranjeros unos 92 millones de hectáreas de concesiones en el territorio nacional. Canadá, Estados Unidos, China, Australia y Japón son los países que mantienen más proyectos mineros en México, gracias a tratados y acuerdos de libre comercio que ha firmado el país azteca por más de 20 años.
“El país que más se ha aprovechado de las reformas neoliberales en México es Canadá, ya que en manos de sus empresarios figuran 207 proyectos mineros, es decir el 74% del total”, explicó la Cámara a La Jornada.
Prueba de su imponencia en el sector minero mexicano es que de las diez minas de oro más grandes de México, siete están concesionadas a empresas canadienses: Goldcorp, Agnico Eagle, Alamos Gold, New Gold, Yamana Gold y Torex Gold Resources. EE.UU. ocupa el segundo lugar con 43 proyectos (el 15 por ciento), seguido de China con 8 proyectos, Australia con 6, y Japón con 5.