La deuda que tiene el gobierno de Chihuahua con proveedores por mil 500 millones de pesos, se deberá pagar antes de que finalice el año o de lo contrario decenas de empresas correrían el riesgo de caer en quiebra por falta de líquidez.
Los organismos empresariales instalados en Chihuahua señalaron que la moratoria del gobierno hará que muchas de las empresas, particularmente las micro y pequeñas, nunca recuperen el gasto financiero.
Iván Noé Simental Ortega, presidente de la Cámara Mexicana de la Construcción (CMIC), indicó a El Financiero que solicitarían que el gobierno destine para el pago a constructores la mitad de los 3 mil millones de pesos que contratará como crédito bancario para terminaar la gestión actual.
Simental Ortega advirtió que de esas empresas constructores, hay más de 30 que ya están en peligro de caer en la bancarrota por falta de pago.
Por su parte, el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), Miguel Guerrero Elías, demandó que el gobierno informe en que se gastará esos 3 mil millones de pesos, así como el nombre de proveedores, obras que realizaron y cantidad adeduda.
También demandó a la Autoría Superior del Estado (ASE) audite el manejo de estos recursos, así como los contratos y los montos pagados a los proveedores que actualmente están en moratoria.