La diputación local solicitó a la Secretaría de Salud, a los Servicios del Estado de Chihuahua y al Instituto Chihuahuense de Salud se implementen distintas campañas intgrales de salud sexual y reproductiva para personas adolescentes indígenas y se empleen profesionistas de la salud que conozcan su idioma, cosmovisión y prácticas culturales.
Los diputados consideraron que hace falta fortalecer el aspecto cultural de las familias indígenas que reciben este tipo de información en el fortalecimiento de una verdadera conciencia sobre la sexualidad y reproducción en personas adolescentes indígenas, así como en sus padres y en el sistema de gobierno indígena de sus pueblos y comunidades.
Según la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica 2009 (ENADID, 2009) las mujeres hablantes de una lengua indígena tienen en promedio su primera unión conyugal de los 18.8 años, esto es casi dos años antes de que las mujeres no hablantes, para quienes la edad promedio es de 20.5 años, según el Inegi 2011.
En el Censo de Población y Vivienda 2010, se indica que el 83.3 por ciento de los adolescentes de 15 a 19 años no hablantes de una lengua indígenas son solteras, pero entre las jóvenes indígenas, de esta misma edad, el porcentaje de solteras desciende al 76.6 por ciento, es decir cada una de cada cuatro ya está casada.
Las diferencias son aún más notorias en el grupo de jóvenes de 20 a 24 años: entre las no hablantes la mitad aún no permanecen solteras (51.1%), mientras que entre las índigenas solamente el 33.8 por ciento; esto significa que dos de cada tres ya está casadas.
Por tales motivos consideran que estas campañas sean realizadas por quién hable la lengua y conozca las prácticas culturales y cosmovisión de los pueblos para que de formar responasble e informada decidan sobre su paternidad y maternidad, pero sobre todo para evitar nacimientos de niños que crecerán en condiciones desfavorables.