Aumenta consumo de ‘crystal’ en menores de edad

La metanfetamina, también conocida como crystal, es una droga altamente adictiva, cuyo consumo en México ha aumentado de manera exponencial desde temprana edad.

¿Qué es el crystal?
El crystal es un polvo de color blanco o arena que también puede presentarse en forma de pequeñas rocas o cristales gruesos y claros.

Normalmente se consume fumándola, pero también se puede inhalar o inyectar.

También se le denomina hielo, ice, met, tiza, vidrio o speed.

Libera fuertes cantidades de dopamina, lo que crea una falsa sensación de felicidad y energía, para posteriormente causar un “bajón” físico y mental.

Se elabora con ingredientes baratos como químicos, ácidos para baterías, limpiador de desagües, combustibles para linternas, anticongelante, acetona, ácido muriático y fertilizante.

De acuerdo con el Gobierno federal, es la segunda droga más traficada en México.

Niños de 10 años, adictos al crystal
La Unidad de Hospitalización Iztapalapa de la red de Centros de Integración Juvenil (CIJ), A.C. atiende, cada año, a por lo menos 200 menores de edad por adicción a la metanfetamina.

Actualmente, yo creo que un 90 por ciento de la solicitud de atención en este centro es por consumo de crystal. El crystal realmente está haciendo muchos estragos por lo fácil que es conseguirlo, por lo fácil que es consumirlo, por lo accesible que es en cuanto al precio”, detalla Mónica Muñoz, directora del CIJ Iztapalapa.

Datos señalan que en 2013, el consumo de dicha droga estaba focalizado en el noreste del país, pero para 2021 se extendió a prácticamente todo el territorio nacional.

La Secretaría de Salud federal documentó que en 2013, las metanfetaminas representaban el 9.5 por ciento del consumo de drogas, cifra que para 2023 aumentó a 49.1 por ciento.

Y entre 2019 y 2023, Baja California, Colima, Durango, Hidalgo, Guanajuato, Guerrero, Jalisco, Estado de México, Morelos y Sinaloa figuraron como los estados donde más aseguramientos de metanfetamina se realizaron.

En el CIJ Iztapalapa se han detectado casos de consumo de crystal en menores de edad a partir de los 10 años.

Las víctimas tienen en común provenir de contextos familiares de violencia, abandono y pobreza.

La Dra. Muñoz sostiene que la falta de oportunidades y espacios seguros provoca que los adolescentes caigan en el ocio, propiciando su acceso a la drogas.

Con información de N+ y López-Dóriga Digital


Source: Mexico