El abogado de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, José Refugio Rodríguez, dijo que su cliente no goza de buena salud, ni física ni psicológica, a diferencia de lo declarado por parte de Renato Sales Heredia, comisionado Nacional de Seguridad.
«¿Para qué se preocupa el gobierno de mandarme a Estados Unidos si no creo llegar a Diciembre?»: fue lo que dijo (Guzmán Loera) en una de nuestras citas? Hay que desenmascarar a la autoridad: mienten. Joaquín dejó de tomar medicamento para la presión cuándo lo dejaron dormir”, aseguró el representante legal del que fuera uno de los hombres más buscados.
Refugio Rodríguez añadió en entrevista con Adela Micha para Grupo Imagen que la autoridad, a pesar de que pregona un trato digno para con Guzmán Loera, no posee evidencias tangibles que lo avalen, además de que sólo se dedican a emitir frases mentirosas, sin dar los pormenores de la situación actual del reo.
La autoridad debe de asegurar la seguridad física, mental, así como la situación jurídica del preso. Ellos controlan todo lo que come, cómo y cuándo se lo dan. Pero niegan el acceso a visitas, descalifican a su defensa y no aportan pruebas garantes de sus comentarios”, demandó.
Señaló que los encargados de la seguridad del Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) número 9 —lugar donde está recluido Guzmán Loera— rechazaron el dictamen psicológico que hizo en perito de la materia, que posee todas las herramientas y conocimientos para aplicar dichas pruebas, tal y como lo demandan las leyes mexicanas.
Le dijeron que no estaba preparado. Al perito lo nombró la autoridad competente y no la defensa legal de Joaquín. Es una técnica o método que busca minar la salud del preso, tal y como lo hacen con ciertas personas en algunas cárceles de los Estados Unidos”, advirtió.
Con respecto a la extradición que pugna el estado de Texas y California, dijo que se están haciendo las diligencias necesarias para que Guzmán Loera sea juzgado dentro de las fronteras nacionales, ya que ‘circularon noticias que decían que sería trasladado a una cárcel con iguales o peores condiciones que donde está ahora: no lo queremos en un Guantánamo; por último:
Si hacemos lo necesario, en diez o doce años podríamos tener la libertad de Joaquín. Hoy lo visitará en el reclusorio se esposa, y yo (Refugio Jiménez) lo veré pasado mañana”; agradeció el seguimiento por parte de los medios de comunicación.
Fuente: Excélsior