Soldados sirios han contabilizado hasta el momento 45 cuerpos en una fosa común encontrada en la ciudad de Palmira luego de ser recuperada de manos del grupo extremista Estado Islámico, dijo el sábado a Reuters una fuente militar.
Fuerzas del Gobierno sirio, respaldadas por aviones militares rusos, expulsaron al Estado Islámico de Palmira el domingo pasado, en un revés para los militantes que habían dinamitado las antiguas ruinas de la ciudad tras capturarla el año pasado.
La fosa común, hallada en el extremo nororiental de Palmira, es la única encontrada hasta ahora en el lugar por las fuerzas sirias, dijo la fuente. Contenía cuerpos de civiles y de miembros del Ejército sirio tomados prisioneros por el Estado Islámico.
La agencia estatal de noticias SANA dijo el viernes que la fosa contenía los cuerpos de numerosas mujeres y niños y que algunos habían sido decapitados.
En mayo del año pasado, cuando el Estado Islámico tomó control de Palmira, medios estatales sirios reportaron que los militantes fundamentalistas asesinaron al menos a 400 personas en los primeros cuatro días tras su ingreso a la ciudad.
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, un grupo activista que realiza un seguimiento del conflicto gracias a sus fuentes en terreno, dijo que el Estado Islámico había matado a numerosas personas al inicio de la captura de Palmira y que las enterró en las afueras de la ciudad. La agrupación reportó el sábado enfrentamientos entre las fuerzas sirias e insurgentes en los alrededores de Qaryatain, al oeste de Palmira.
Un oficial Ejército sirio, por su parte, sostuvo que Estado Islámico había colocado miles de minas en Palmira y que planeaba detonarlas de manera simultánea a medida que avanzaba para despejar el lugar.
El oficial añadió que las principales vías y calles de Palmira estaban llenas de explosivos de hasta 50 kilos. Más de 3 mil minas ya han sido detonadas bajo medidas de seguridad.