El pasado 12 de marzo un avión de British Airways, con destino a Londres, se inundó en pleno vuelo, informa BBC.
El Airbus A380 empezó a llenarse de agua rápidamente, lo que provocó el susto de los pasajeros a bordo, sin embargo el capitán pidió mantener la calma pues no se trataba de una emergencia en la que corrieran peligro, añade la cadena británica.
Las azafatas cubrieron los pasillos con toallas para absorber el agua y no causar más problemas a los pasajeros, sin embargo algunos reportaron problemas con su equipaje. La aerolínea respondió por los daños.
Luego de casi una semana de investigación, British Airways dictaminó que uno de los carros de comida rompió una de las tuberías del avión, por lo cual el avión se llenó de agua.