Una fiesta escandalosa que alrededor de 15 personas, entre ellos varios menores de edad, sostenían en la colonia Riberas de Sacramento la madrugada del domingo, fue interrumpida por agentes de la Policía Municipal que remitieron a 7 de los participantes luego de negarse a la orden de los municipales.
Al arribo de los policías dos de los presuntos responsables se negaron a parar el ruido aduciendo ser integrantes de un grupo delictivo y por respuesta dijeron “háganle como puedan”, luego les lanzaron algunos golpes, lo que dio inicio a la acción de los agentes para someterlos y llevarlos a la Comandancia Norte.
Dos de los detenidos son menores de edad que se encuentran bajo custodia del Departamento de Trabajo Social luego de localizarse también en la fiesta que se realizaba con escándalos e ingesta de bebidas alcohólicas en las calles Río Colorado y Río Tajo 1821 del citado fraccionamiento.
Los detenidos ocasionaron daños a los uniformes de algunos agentes y en algunos instrumentos de trabajo durante el sometimiento con técnicas de arresto.
Sus nombres son Jesús José C., de 26 años; Gamaliel O. de 45, Jesús Manuel L. de 21, así como Edén Abraham O., de 24 años y César Damián M. O. de 28 años. Estos últimos los que trataron de intimidar a los elementos diciéndose integrantes de un cartel delictivo.
Todos los arrestados serán puestos a disposición de la autoridad ministerial para que respondan por los daños y demás cargos a que haya lugar derivados de su negativa a bajar el volumen de la música y dejar dormir a sus vecinos.
La música a alto volumen constituye una falta al Bando de Policía y Buen Gobierno y muchas veces se suma a escándalo por discusiones al calor del alcohol lo cual ocasiona molestias a los vecinos y no abona a la buena convivencia. Cuando la gente se niega a dejar de escandalizar, los agentes de la policía municipal les infraccionan con una multa económica, aun cuando los señalados no salgan de sus vivienda.